Un electricista tuvo en sus manos lo que cualquier miembro del SME hubiera soñado: la 'donación más grande que Pablo Picasso habría hecho a alguien.
Sin saber que la perdería por que existe el antecedente de que el artista celaba en demasía su obra, además de que generalmente firmaba o dedicaba sus donaciones, cosa que en este caso ocurrió -lo que hace suponer que fue robada- el electricista francés Pierre Le Guennec intentó actual de buena fe...
Así, en meses pasados, cuando el jubilado intentó autentificar la obra para cobrar la fortuna en la que está valuada -alrededor de 40 millones de euros-, el heredero de Picasso contactó a una brigada especializada en obras de arte para evitar perder la colección.
Me imagino el desmadre que se hubiera armado si este electricista hubiera sido del SME...